Los humanistas en sus viajes de estudio a través de las bibliotecas de los viejos monasterios descubrieron innumerables textos escritos en minúscula Carolina de los siglos IX y XII. Los ejemplos más antiguos de la escritura humanística se remontan a principios del siglo XV, esta escritura presentaba dos variantes redonda y cursiva.
En la humanística redonda los copistas del siglo XV introdujeron algunos elementos extraídos de la gótica. Los primeros ejemplos de humanística cursiva fueron posteriores a una década a los de la humanística redonda, tenía un aspecto ligero, trazada con pluma de punta, primero derecha y luego muy inclinada hacia la derecha.